Redacción
Entiendo que el Sindicato del Poder Judicial del Estado tenga su pliego petitorio como todos los años -lanza una para ganar dos-, siempre peleando por ganar ventaja y nunca aplicando criterios o políticas de ganar-ganar, es decir si yo me veo favorecido en un acuerdo, entonces la institución también se ve beneficiada y por ende la ciudadanía, pero desafortunadamente no es el caso; estos grupos piden y piden y como dijera AMLO, “no tienen llenadera”.
Lo cierto es que la crisis económica que impacta a México obliga a replantear las estructuras gubernamentales que como pronunció hace unos días el nuevo secretario de administración, German Espinosa, “necesario adelgazar obesidad mórbida del Gobierno”. Una de las estrategias para impulsar al país hacia una libertad financiera es la disminución del gasto público, sin embargo, con tantos cotos de poder y sindicalismo estamos lejos de alcanzar ese objetivo.
Un segundo día de toma de juzgados, un segundo día en el que la ciudadanía se queda sin acceso a la justicia; el exigir un derecho pisoteando el derecho de otros, hace ilegitima cualquier pretensión, por muy válida que ésta sea.
Hasta cuándo seguiremos permitiendo que cualquier organización, grupo, sindicato, etc. tome, bloquee, desestabilice, destruya y robe la paz y la estabilidad de los oaxaqueños; el fin no justifica los medios, de ninguna manera, es más, existe un hartazgo social en las formas que utilizan estas organizaciones para lograr obtener prebendas del gobierno; ya que el único afectado es el ciudadano a pie.
Ahí se los dejo para su análisis…
